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Thursday, December 02, 2010

En Zitácuaro: generación de gas y electricidad a partir de la biomasa del nopal

La biomasa del nopal permitirá la generación de energía limpia y renovable, que ha sido seleccionado por sus cualidades genéticas. El día de hoy, histórico para Michoacán y México el gas producido encendió el mechero como prueba contundente.

ZITACUARO, Mich.- diciembre 2, de 2010, apenas el 15 de septiembre del año en curso iniciaron las operaciones de prueba de una planta de generación de gas y electricidad a partir de la biomasa del nopal, informó el portal laregionenlinea.com. en ese entonces. A menos de tres meses, del inicio de las pruebas, el día de hoy, el mechero encendió con el producto esperado: el gas; comprobando con esto la viabilidad del proyecto en su primera fase. Lo que sigue es la generación de energía eléctrica a través de un generador alimentado por el gas metano.


El corporativo Nopal Energía y Vida, NVD, encabezada por el  Señor Rogelio Sosa López, de la localidad, socio fundador de la empresa, quién cuenta con gran experiencia en la industria de la masa y la tortilla ha agrupado a un grupo de profesionales como el Ing. Agrónomo, Silvestre Ruiz López, experto en la modificación Genética del nopal, galardonado en dos ocasiones premio nacional  por sus investigaciones sobre el nopal; y al Ing. Rodrigo Wayland Morales, Ingeniero en alimentos e Ingeniero ambiental, experto  en el diseño de biodigestores para la producción de biogas.


La empresa es asesorada además, por consultores de la ONUDI , el Instituto Politécnico Nacional y la Universidad Tecnológica de Nezahualcoyotl.


El cultivo del nopal es  de mayor importancia en el México de la actualidad, no sólo porque está integrado a la canasta básica, sino que representa una opción energética viable para la producción de biogás y energía eléctrica. Además el nopal es el símbolo que representa a nuestra cultura y orgullo de mexicanos.
Comparándolo con la jatropha, tomando  como referencia una hectárea de cultivo; el  nopal produce 43 mil 200 M3 de biogás o bien el equivalente en términos de energía a 30 mil litros de diesel, mientras que la Jatropha, únicamente produce 3 mil litros de biodiesel por Ha dejando muy claramente que el nopal, que  aparte de ser su cultivo muy versátil, es  de bajo costo.
El nopal representa sin duda alguna, una excelente solución a la crisis agrícola actual, representa una gran innovación tecnológica y compite con gran ventaja en materia de productividad con otros tipos de energías renovables, tales como;  solar,  térmica, eólica y otros tipos de biomasa, como la basura orgánica, o el excremento de animales;  muy por encima de productos como el maíz, caña de  azúcar, yuca, trigo y jatropha) además de ser una fuente de energía, limpia y renovable y con una recuperación de la inversión en el corto plazo.


Para comenzar a implementar este cultivo en Zitacuaro, fue necesario introducir las variedades que pudieran  adaptarse a sus suelos y clima, para poder evaluar, su desarrollo fenológico, así como su comportamiento en la acumulación de biomasa y detectar las variedades más adecuadas a la región.


Por esta razón, se llevó a cabo el establecimiento de una plantación experimental, que el día de hoy rinde los resultados esperados; de algunas variedades de la especie ficus indica, así como del género opuntia robusta, para su evaluación en su comportamiento, crecimiento y adaptabilidad y producción de gas.
En general, los suelos de Zitacuaro, son excelentes para el desarrollo de este cultivo y resultan adecuados dentro de lo que el nopal necesita para su alta productividad.


Es claro que la bioenergía substituirá, a los combustibles fósiles, el quid del asunto es encontrar la biomasa más adecuada,  la más barata y que ayude a restaurar el medio ambiente, sin afectar la producción alimentaria. 


La biomasa del nopal permitirá la generación de energía limpia y renovable, que ha sido seleccionado por sus cualidades genéticas ,su alta productividad y por supuesto su rentabilidad en la generación de gas.


La implementación de este proyecto a escala, permitirá al municipio de Zitácuaro, a corto plazo, el autoabastecimiento energético eléctrico, asimismo la entrega y el soporte técnico para  la utilización de biogás comprimido o criogénico,  en sus centros de consumo.
En el mediano plazo, la venta de bonos de carbono permite amortizar en parte los costos de implementación, de la misma manera, proyecta una imagen muy positiva en cuanto al cuidado del medio ambiente.


En el largo plazo, la producción verde de energía permitirá la apertura de los exigentes mercados de Europa donde la problemática ambiental pasa a ser un factor relevante al momento de hacer negocios.


Proyecto Zitacuaro


Producción de harina de nopal y elaboración de tortillas y sus derivados a través de un proceso de energía limpia y renovable en el municipio de Zitácuaro.
Utilizando la biomasa del nopal para la producción de gas y energía eléctrica, se obtendrá en el municipio de Zitácuaro  Michoacán, la producción de harina de nopal, tortilla enriquecida  con nopal, linaza, amaranto y ácido fólico.


Para la elaboración de éstos productos alimenticios además de aprovechar las bondades de la generación de energía eléctrica a partir de la biomasa del nopal, se ha aplicado la metodología de producción más limpia para optimizar el uso del agua, las materias primas y el consumo de energía eléctrica.


Este proyecto que es único en México y que hoy se prueba que es viable para el municipio de Zitácuaro, y para todo el país también puede ser incluido, como un plus del proyecto en el programa de Mecanismo de Desarrollo Limpio, contemplado en el Protocolo de Kyoto y participar en los bonos de carbono. Es una acción concreta, efectiva y viable para el combate del cambio climático y debería de estar en la carpeta de México, para hacerlo del conocimiento de todas las naciones del mundo, en el marco de la cop16 que se celebra en estos días en la Ciudad de Cancún Quintana Roo.


Lo anterior permitirá la elaboración de tortilla de mejor calidad, con alto contenido proteico y a precios competitivos en el mercado nacional e internacional, siendo sus principales beneficiarios los grupos vulnerables.

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Wednesday, October 06, 2010

Hoy Twitter se viste de fiesta!!!

donfede

Ese es una de las principales razones por las que todos dudamos que don Fede sea serio… y x las que no debe uno publicar su número celular en Twitter.

jajajajajajajajajaja

Saturday, October 02, 2010

No se podía esperar otra cosa

Y bueno, en su afán de seguir con esa costumbre de hacer televisión vacía. Un productor de TV Milenio “Jorge Lugo” engalanó la mañana con un comentario estúpido desde su ya cerrada cuenta de Twitter.

JorgeLugoestupido

Thursday, August 05, 2010

Ohhh x Diooos Nooooo!!!!!

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Mujer: ¿A donde vas?
>Hombre: Salgo un ratito..
>M: ¿Te llevas el auto?
>H: Sip
>M: ¿Tiene gasolina?
>H: Si, ya le puse.
>M: ¿Vas a tardar mucho?
>H: No, una horita más o menos
>M: ¿Adonde vas?
>H: No sé... por ahí... solo a dar una vuelta..
>M: Y... ¿no prefieres ir caminando?
>H: No, me voy en el auto
>M: ¿Me traes un helado?
>H: ¿De qué lo quieres?
>M: De mango
>H: Bien, de regreso paso a la heladería y te lo traigo
>M: ¡¿De regreso?!
>H: ¡Si!... porque sino se derrite
>M: ¿Por qué no vas ahora, vuelves y me lo dejas?
>H: Mejor a la vuelta... va a ser mejor
>M: ¡Uta... ma...!
>H: Cuando vuelva tomamos el helado juntos
>M: Pero no te gusta el mango
>H: Me compro otro
>M: ¡Trae de vainilla!
>H: Tampoco me gusta la vainilla
>M: ¡Trae de chocolate entonces!, que nos gusta a los dos
>H: ¡Ok!... besos, vuelvo en un rato
>M: ¡Oye...!
>H: ¡¿Qué?!
>M: Mejor chocolate no... ¡Trae fresa!
>H: ¡No me gusta la fresa!
>M: Entonces traeme mango a mí y tú el que quieras
>H: Fué lo que dije desde el principio...
>M: ¿Estas siendo irónico?
>H: Oh!!! nop... ya me voy...
>M: Dame un beso!
>H: bueno... (beso)
>M: ¿Vas en tu auto o en el mío?
>H: En el mío
>M: Usa el mío, tiene cd. El tuyo no...
>H: No quiero oir música, voy a despejarme un poco...
>M: ¿Necesitas despejarte?
>H: ¡No sé!... Cuando regreso te digo.
>M: ¡No tardes!
>H: No tardo... (abre la puerta)
>M: ¡Amor...!
>H: ¡¿Y ahora qué?!.....
>M: ¡Uuuyyy! ¡Que grosero!...
>H: Amor... ¡Estoy intentando irme y no me dejas!
>M: ¿Por qué quieres ir solo? ¿Te vas a encontrar con alguien?
>H: ¡¿Qué quieres decir?!
>M: ¡Nada, nada...! olvídalo...
>H: ¡Ven acá! (cariñoso)... ¿Crees que te estoy engañando con alguien?
>M: ¡No... claro que no!... pero ya sabes como son...
>H: ¿Cómo son qué?
>M: ¡Los hombres!
>H: ¿Estás generalizando o estás hablando de mí?
>M: Estoy generalizando
>H: Entonces no me lo apliques. Sabes que no te haría algo así.
>M: Está bien... vete entonces.
>H: Ya! Ya! ya me fuí!!!!
>M: Oye...
>H: ¡AY POR DIOS!... ¡¿Qué?!
>M: Llevate el celular...
>H: ¿Para qué?... ¿Para que me estés llamando constantemente?
>M: ¡No!... Por si pasa algo.
>H: No te preocupes...
>M: ¡Ok, ok...! Perdóname por la desconfianza... ¡Es que te extraño!
>H: Está bien. No quise contestarte así. ¡Te amo!
>M: ¡Yo también!
>M: ¿Puedo usar tu celular?
>H: ¿Para qué?
>M: ..¡Los jueguitos!
>H: ¿Quieres mi celular para jugar?
>M: Sip
>H: Usa la computadora, hay un montón de juegos ahí.
>M: No entiendo ese aparato...
>H: ¿Y para qué me hiciste que te la comprara el mes pasado?
>M: No importa... entonces llevate el celular porque sino lo voy a usar.
>H: Úsalo... no hay nada importante en él.
>M: ¿Si?...
>H: ¡Sí!
>M: ¿Dónde esta?
>H: ¿Que cosa?
>M: ¡Lo que debería estar en el celular y no está!
>H: ¡¿Qué?!
>M: ¡Nada!... ¡Olvídalo!
>H: ¿Estás enojada?
>M: No, no estoy.
>H: ¡...Entonces me voy!
>M: ¡Amor....!
>H: ¡¡¿¿QueeeeEEEEÉ!!??
>M: ¡Ya no quiero helado!
>H: ¡¿Ah no?!
>M: ¡No!
>H: (Un suspiro)... Ok...Ok.. Ya no voy a salir!
>M: ¿Ah si?
>H: ¡Sí!
>M: ¿Entonces te quedas conmigo?
>H: ¡No!, ¡Me aburriste!! me voy a dormir!
>M: ¿Estás enojado?
>H: ¡Sí!
>M: ¿Y POR QUE MEJOR NO TE VAS A DAR UNA VUELTA PARA DESPEJARTE?
>
>OH QUE LA CHINGADA

Thursday, July 29, 2010

Punto y ¡aparte!

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Pues en un hecho sin precedentes en la historia de la televisión mexicana y como respuesta al secuestro de  los reporteros   desde el pasado lunes 26 de julio en la Laguna, Durango. La periodista Denise Maerker en Televisa, suspendió la transmisión del programa “Punto de Partida”

Aproximadamente  a las 23:45 del 29 de julio de 2010. La periodista emitió un mensaje a la opinión  pública en el que señalaba que no estaba dispuesta a salir y fingir que no pasaba nada.

Como dije al principio, es un hecho histórico, sin embargo no hay que perder el piso o el contexto real.

En el país han habido más secuestros, asesinatos y violaciones de derechos humanos que los que se dieron el pasado 26. Sin embargo Televisa y la periodista a quien no demerito su trabajo, hacen uso de un medio de comunicación masivo para mostrar su postura y su rechazo; claro, cada uno lo hace desde su propia trinchera. Pero no podemos perder de vista que esto también es una excelente excusa para Televisa para vender una imagen de algo que no son.´

Ahora resulta que lo sucedido el lunes 26 tuvo mayor peso que lo que ha sucedido en años…

En fin,  si uds compran TODA la idea que Televisa trata de vender, será un PUNTO para ellos y… APARTE. 

Por los que no hicieron SánGüichez…

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Un castigo ¿“ejemplar”?

Hace unos instantes, leí una nota en la que señalan que luego de la mala participación que tuvo la selección de Corea del Norte, los jugadores fueron humillados públicamente.

El castigo: estar en posición de firme durante seis horas frente al palacio de la cultura popular de Pyongyang para que la gente los insultara. Al que menos pior, le fue es al técnico Kim Jong Hun, al que castigaron con trabajos forzados.

Y ¿cuál fue el delito ? “traicionar la confianza del Querido Líder (Kim Jong il) tras una deshonrosa participación en Sudáfrica”.

Que le digan eso al Bofo Bautista. Tal vez no le molestaría tanto la idea, si al final de cuentas no tendría más que quedarse parado sin hacer nada… como es su costumbre.

Otra vez desvelado –¿Qué buscamos en la madrugada que no encontramos en el día?

 

Pues sí, una vez más desvelado. Son las 4:49 am. Y a la mente me llega esta idea: ¿qué es lo que buscamos en la madrugada que no encontramos en el día? ¿Está en el alma? ¿hábitos?.

Sea como sea, una vez más bajo el cobijo de la madrugada encontré una algo digno de compartir.

Es un cuento de Hernando Téllez  "Espuma y nada más”

Bueno aquí se los dejo. La verdad vale la pena.

Ojalá lo disfruten si es que alguien se da su vuelta por aquí.

 

Espuma y Nada Más

por Hernando Téllez

No saludó al entrar. Yo estaba repasando sobre una badana la mejor de mis navajas. Y cuando lo reconocí me puse a temblar. Pero el no se dio cuenta. Para disimular continué repasando la hoja. La probé luego sobre la yema del dedo gordo y volví a mirarla contra la luz. En ese instante se quitaba el cinturón ribeteado de balas de donde pendía la funda de la pistola. Lo colgó de uno de los clavos del ropero y encima colocó el kepis. Volvió completamente el cuerpo para hablarme y, deshaciendo el nudo de la corbata, me dijo: “Hace un calor de todos los demonios. Aféiteme”. Y se sentó en la silla. le calculé cuatro días de barba. Los cuatro días de la última excursión en busca de los nuestros. El rostro aparecía quemado, curtido por el sol. Me puse a preparar minuciosamente el jabón. Corté unas rebanadas de la pasta, dejándolas caer en el recipiente, mezclé un poco de agua tibia y con la brocha empecé a revolver. Pronto subió la espuma “Los muchachos de la tropa debep tener tanta barba como yo”. Seguí batiendo la espuma. “Pero nos fue bien, ¿sabe? Pescamos a los principales. Unos vienen muertos y otros todavía viven. Pero pronto estarán todos muertos”. “¿Cuántos cogieron?” pregunté. “Catorce. Tuvimos que internarnos bastante para dar con ellos. Pero ya la están pagando. Y no se salvará ni uno, ni uno”. Se echó para atrás en la silla al verme la brocha en la mano, rebosante de espuma Faltaba ponerle la sábana. Ciertamente yo estaba aturdido. Extraje del cajón una sábana y la anudé al cuello de mi cliente. El no cesaba de hablar. Suponía que yo era uno de los partidarios del orden. “El pueblo habrá escarmentado con lo del otro día”, dijo. “Sí”, repuse mientras concluía de hacer el nudo sobre la oscura nuca, olorosa a sudor. “¿Estuvo bueno, verdad?” “Muy bueno”, contesté mientras regresaba a la brocha. El hombre cerró los ojos con un gesto de fatiga y esperó así la fresca caricia del jabón. Jamás lo había tenido tan cerca de mí. El día en que ordenó que el pueblo desfilara por el patio de la escuela para ver a los cuatro rebeldes allí colgados, me crucé con él un instante. Pero el espectáculo de los cuerpos mutilados me impedía fijarme en el rostro del hombre que lo dirigía todo y que ahora iba a tomar en mis manos. No era un rostro desagradable, ciertamente. Y la barba, envejeciéndolo un poco, no le caía mal. Se llamaba Torres. El capitán Torres. Un hombre con imaginación, porque ¿a quién se le había ocurrido antes colgar a los rebeldes desnudos y luego ensayar sobre determinados sitios del cuerpo una mutilación a bala? Empecé a extender la primera capa de jabón. El seguía con los ojos cerrados. “De buena gana me iría a dormir un poco”, dijo, “pero esta tarde hay mucho qué hacer”. Retiré la brocha y pregunté con aire falsamente desinteresado: “¿Fusilamiento?” “Algo por el estilo, pero más lento”, respondió. “¿Todos?” “No. Unos cuantos apenas”. Reanudé de nuevo la tarea de enjabonarle la barba. Otra vez me temblaban las manos. El hombre no podía darse cuenta de ello y ésa era mi ventaja. Pero yo hubiera querido que él no viniera. Probablemente muchos de los nuestros lo habrían visto entrar. Y el enemigo en la casa impone condiciones. Yo tendría que afeitar esa barba como cualquiera otra, con cuidado, con esmero, como la de un buen parroquiano, cuidando de que ni por un solo poro fuese a brotar una gota de sangre. Cuidando de que en los pequeños remolinos no se desviara la hoja. Cuidando de que la piel, quedara limpia, templada, pulida, y de que al pasar el dorso de mi mana por ella, sintiera la superficie sin un pelo. Sí. Yo era un revolucionario clandestino, pero era también un barbero de conciencia, orgulloso de la pulcritud en su oficio. Y esa barba de cuatro días se prestaba para una buena faena.

Tomé la navaja, levanté en ángulo oblicuo las dos cachas, dejé libre la hoja y empecé la tarea, de una de las patillas hacia abajo. La hoja respondía a la perfección. El pelo se presentaba indócil y duro, no muy crecido, pero compacto. La piel iba apareciendo poco a poco. Sonaba la hoja con su ruido característico, y sobre ella crecían los grumos de jabón mezclados con trocitos de pelo. Hice una pausa para limpiarla, tomé la badana, de nuevo yo me puse a asentar el acero, porque soy un barbero que hace bien sus cosas. El hombre que había mantenido los ojos cerrados, los abrió, sacó una de las manos por encima de la sábana, se palpó la zona del rostro que empezaba a quedar libre de jabón, y me dijo: “Venga usted a las seis, esta tarde, a la Escuela”. “¿Lo mismo del otro día?”, le pregunté horrorizado. “Puede que resulte mejor”, respondió. “¿Qué piensa usted hacer?” “No sé todavía. Pero nos divertiremos”. Otra vez se echó hacia atrás y cerró los ojos. Yo me acerqué con la navaja en alto. “¿Piensa castigarlos a todos?”, aventuré tímidamente. “A todos”. El jabón se secaba sobre la cara. Debía apresurarme. Por el espejo, miré hacia la calle. Lo mismo de siempre: la tienda de víveres y en ella dos o tres compradores. Luego miré el reloj: las dos veinte de la tarde. La navaja seguía descendiendo. Ahora de la otra patilla hacia abajo. Una barba azul, cerrada. Debía dejársela crecer como algunos poetas o como algunos sacerdotes. Le quedaría bien. Muchos no lo reconocerían. Y mejor para él, pensé, mientras trataba de pulir suavemente todo el sector del cuello. Porque allí sí que debía manejar coro habilidad la hoja, pues el pelo, aunque es agraz, se enredaba en pequeños remolinos. Una barba crespa. Los poros podían abrirse, diminutos, y soltar su perla de sangre. Un buen barbero como yo finca su orgullo en que eso no ocurra a ningún cliente. Y éste era un cliente de calidad. ¿A cuántos de los nuestros había ordenado matar? ¿A cuántos de los nuestros había ordenado que los mutilaran? ... Mejor no pensarlo. Torres no sabía que yo era un enemigo. No lo sabía él ni lo sabían los demás. Se trataba de un secreto entre muy pocos, precisamente para que yo pudiese informar a los revolucionarios de lo que Torres estaba haciendo en el pueblo y de lo que proyectaba hacer cada vez que emprendía una excursión para cazar revolucionarios. Iba a ser, pues, muy difícil explicar que yo lo tuve entre mis manos y lo dejé ir tranquilamente, vivo y afeitado.

La barba le había desaparecido casi completamente. Parecía más joven, con menos años de los que llevaba a cuestas cuando entró. Yo supongo que eso ocurre siempre con los hombres que entran y salen de las peluquerías. Bajo el golpe de mi navaja Torres rejuvenecía, sí; porque yo soy un buen barbero, el mejor de este pueblo, lo digo sin vanidad. Un poco más de jabón, aquí, bajo la barbilla, sobre la manzana, sobre esta gran vena. ¡Qué calor! Torres debe estar sudando como yo. Pero él no tiene miedo. Es un hombre sereno que ni siquiera piensa en lo que ha de hacer esta tarde con los prisioneros. En cambio yo, con esta navaja entre las manos, puliendo y puliendo esta piel, evitando que brote sangre de estos poros, cuidando todo golpe, no puedo pensar serenamente. Maldita la hora en que vino, porque yo soy un revolucionario pero no soy un asesino. Y tan fácil como resultaría matarlo. Y lo merece. ¿Lo merece? No, ¡qué diablos! Nadie merece que los demás hagan el sacrificio de convertirse en asesinos. ¿Qué se gana con ello? Pues nada. Vienen otros y otros y los primeros matan a los segundos y éstos a los terceros y siguen y siguen hasta que todo es un mar de sangre. Yo podría cortar este cuello, así, ¡zas! No le daría tiempo de quejarse y como tiene los ojos cerrados no vería ni el brillo de la navaja ni el brillo de mis ojos. Pero estoy temblando como un verdadero asesino. De ese cuello brotaría un chorro de sangre sobre la sábana, sobre la silla, sobre mis manos, sobre el suelo. Tendría que cerrar la puerta. Y la sangre seguiría corriendo por el piso, tibia, imborrable, incontenible, hasta la calle, como un pequeño arroyo escarlata. Estoy seguro de que un golpe fuerte, una honda incisión, le evitaría todo dolor. No sufriría. ¿Y qué hacer con el cuerpo? ¿Dónde ocultarlo? Yo tendría que huir, dejar estas cosas, refugiarme lejos, bien lejos. Pero me perseguirían hasta dar conmigo. “El asesino del Capitán Torres. Lo degolló mientras le afeitaba la barba. Una cobardía”. Y por otro lado: “El vengador de los nuestros. Un nombre para recordar (aquí mi nombre). Era el barbero del pueblo. Nadie sabía que él defendía nuestra causa...” ¿Y qué? ¿Asesino o héroe? Del filo de esta navaja depende mi destino. Puedo inclinar un poco más la mano, apoyar un poco más la hoja, y hundirla. La piel cederá como la seda, como el caucho, como la badana. No hay nada más tierno que la piel del hombre y la sangre siempre está ahí, lista a brotar. Una navaja como ésta no traiciona. Es la mejor de mis navajas. Pero yo no quiero ser un asesino, no señor. Usted vino para que yo lo afeitara. Y yo cumplo honradamente con mi trabajo... No quiero mancharme de sangre. De espuma y nada más. Usted es un verdugo y yo no soy más que un barbero. Y cada cual en su puesto. Eso es. Cada cual en su puesto.

La barba había quedado limpia, pulida y templada. El hombre se incorporó para mirarse en el espejo. Se pasó las manos por la piel y la sintió fresca y nuevecita.

“Gracias”, dijo. Se dirigió al ropero en busca del cinturón, de la pistola y del kepis. Yo debía estar muy pálido y sentía la camisa empapada. Torres concluyó de ajustar la hebilla, rectificó la posición de la pistola en la funda y, luego de alisarse maquinalmente los cabellos, se puso el kepis. Del bolsillo del pantalón extrajo unas monedas para pagarme el importe del servicio. Y empezó a caminar hacia la puerta. En el umbral se detuvo un segundo y volviéndose me dijo:

“Me habían dicho que usted me mataría. Vine para comprobarlo. Pero matar no es fácil. Yo sé por qué se lo digo”. Y siguió calle abajo.

Saturday, July 24, 2010

¡Despierta México!

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Jueves 17 de julio de 2010. 1:30 pm –Hora del centro de México -

El país se paraliza, la selección mexicana de fútbol se medirá ante su similar de Francia, en lo que es el segundo encuentro de la primera ronda del Mundial Sudáfrica 2010. Lugar : Peter Mokaba Stadium

Mucho se ha especulado sobre el pase de la selección, algunos se muestran optimistas, otros con dudas, algunos indiferentes y de plano otros muestran su rechazo total. Sin embargo no se puede negar que ha captado la atención de todo el país. Escuelas, trabajos, comercios y trabajadores independientes, se paralizan y se olvidan de la realidad por 90 minutos.

90 minutos en los que Javier "el Chihcarito" Hernández y Cuauhtémoc Blanco hicieran creer a muchos que es posible soñar, y ser un equipo grande. Sí, la selección gana 2 a 0. Aún queda un partido y las esperanzas de mexicanos han nacido.

Muy bien, pero… ¿Y?  Luego de la victoria, gente se volcó a puntos importantes de su ciudad para expresar alegría y felicidad por el resultado. Esto nos permite ver  esa enorme necesidad del mexicano por sentir una victoria. (hagamos a un lado lo deportivo, que a final de cuentas eso no tiene caso) me refiero a colgar sus esperanzas de manera falsa en cualquier elemento que le permita escaparse de su realidad, que le permita soñar, que “sí se puede”…

¡Despierta México!  aún si se hubiese llegado al 5o partido eso no va a generar un cambio o avance significativo en materia de educación, política, economía y sobre todo,  en el pensamiento.

Sigo sin entender, por qué es más fácil colgarse del triunfo ajeno y no crearse el propio.

Sigo sin entender, por qué, no logramos despertar…

Tuesday, June 15, 2010

No lo haremos, porque nunca se ha hecho.

Sea en la iniciativa privada, en las dependencias gubernamentales o hasta en las personas, este argumento es común y a continuación si pretender mostrarme como un mega experto en el tema quiero compartir la siguiente reflexión.
Muchas veces me he preguntado, qué es lo que motiva a una persona a contestar de esta manera,
¿Acaso será por no hacer lo que se debe?¿Es por temor al cambio?¿Por no dar más allá de lo que se pide o espera? O como alguna vez una persona me dijo: ¿Para qué hacerlo? si así como estamos no hay margen de error, no esperan más de mi y no corro el riesgo a equivocarme. –Uhmm de eso más abajo contestaré-

Las razones podrán variar, sin embargo más que buscar o exponer los “no” quiero plantear la idea del porqué sí. Aún cuando se tache a uno de loco, soñador o ingenuo; ¡ufff! Por favor, un poco de eso es lo que hace falta para las grandes genialidades, si no se intentaran las cosas sólo porque nunca se han hecho, hoy no habría aviones, automóviles, computadoras, internet, teléfonos celulares y todos los inventos que hoy forman parte de nuestra vida. Si es que nos vamos por ese lado; ahora bien, y en la empresa ¿esto aplica? ¡Definitivo!, no se trata sólo de crear un producto, sino innovar, buscar otras opciones de lo que actualmente se realiza y que tenga el potencial para crecer.

Ahora bien, no se trata de hacer disparates sólo porque creemos que tenemos una gran idea. Recordemos que una genialidad es 1% inspiración y 99% transpiración, y esto significa que a partir de una idea que tenemos que pensamos que puede ser muy buena, debemos pensar en algunas opciones como:
Esto que propongo ¿Cómo mejorará lo que actualmente se realiza? ¿Traerá repercusiones positivas en el aspecto, económico, servicio, calidad, imagen? ¿Qué pasa si no se realiza?

Una vez que se tenga claro el camino a tomar, es momento de implementar el famoso proceso administrativo, a final de cuentas hacer algunas mejoras implica riesgos y para valorarlos y medirlos siempre es necesario tener un proceso que nos permita verificar paso a paso lo que se hace, hasta alcanza una calidad total.

Recuerdo que durante el tiempo que fui maestro de universidad, tuve la oportunidad de impartir la materia de creatividad, y uno de los principales objetivos era que los alumnos aprendieran a ver y pensar de manera diferente, que tuvieran la capacidad de adaptarse a la situación o contexto que se les presentara y sobre todo olvidarse perder el temor a “fracasar” o a la burla, sólo por no pensar como los demás.

Entonces contestaría el comentario que me hiciera un Editor del Diario de Yucatán y que mencioné al principio ¿Y por qué no? Si así como está, todo sigue igual, no hay mejoras, y el potencial de oportunidades es superior a un simple regaño.
Prefiero pensar ¿qué pasaría si…?